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Renacer

Fue en ese momento en el que ella se levantó y con paso tambaleante, frente a la atenta mirada de sus vecinos se acercó hacia los restos de lo que alguna vez fue su hogar, allí cerca de la entrada se podía vislumbrar dos figuras carbonizadas, al ver esto fue como si una presa se hubiese desbordado y comenzó a llorar de nuevo, pero con más intensidad, librando tales gritos desgarradores que podrían ser escuchados al otro lado del pueblo, con velocidad se acercó a esos cuerpos y los abrazó mientras lloraba,                                    en ese momento los pensamientos de culpa la invadieron pensado que nada de esto hubiese sucedido si no fuera al mercado hoy, si no se hubiese tardado tanto al hacer las compras, si hubiese llegado solo un poco más rápido.

Pero la verdad es que el pasado no se puede cambiar y ella tendrá que cargar con esta culpa                                    para siempre, ella continuó en este ciclo de auto reproche hasta que varios vecinos se acercaron para alejarla de los cadáveres de sus hijos ella luchó e hizo todo lo posible para evitar que la alejasen de sus bebés.

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Hasta el punto en el que se necesitaron varias personas para sostenerla y llevarla a una casa vecina para que se calmase allí se sentó sollozando, pero con algo de tiempo se logró tranquilizar pero quien sea que la mirase podía notar que había algo ausente en sus ojos, tenía la mirada perdida y apenas reaccionó cuando le trajeron algo de comer,

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Lago Tomo

Ella simplemente se sentó parte de la noche allí mirando a la nada, los dueños del hogar acordaron dejarla allí, darle su tiempo y no molestarla, ya que ha pasado por mucho, ella se quedó sentada hasta aproximadamente la medianoche, fue en ese momento que simplemente se levantó de su asiento mientras todos ya estaban descansando y salió de la casa, y caminó sin rumbo durante un par de horas, fue justo cuando el amanecer daba sus primeras señales de llegar que ella dio con un puente y allí se detuvo se quedó observando                                   las embravecidas aguas que corrían en el lago justo debajo del puente y pensando que no puede vivir con la pena de ver a sus hijos morir, decidió lanzarse al lago y morir ahogada.

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Tras un breve momento en el río donde no había nada más que oscuridad para ella, ella pudo ver que todo se aclaraba lentamente y se encontró en un lugar cómodo y agradable más hermoso que cualquier lugar, por un momento ella pudo sentirse en paz, pero esta paz rápidamente se vio mermada tras recordar a sus hijos y la culpa de nuevo la lleno, antes que pudiese lamentarse escucho una voz que al parecer no venía de ningún lugar.

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“Candelaria por tus pecados, por tu permisividad y por tus descuidos con tus hijos, ellos han muerto, es el deber de todo padre asegurarse de que sus hijos caminen por la senda correcta y corregirlos cuando ellos se desvíen. Por tu falta de carácter tu hijo mayor murió en un accidente que podría haber sido evitado si tú hubieses corregido las conductas de tus hijos, por esto los errores y las faltas de los hijos son los pecados de los padres y para expiar estos pecados yo te condeno a vagar en busca de pecadores que aún pueden ser redimidos y marcarlos como forma de advertencia para que corrijan sus malos caminos, desde el atardecer hasta que la luz del alba ilumina el cielo serás consumida por dos llamas que te quemarán desde lo más profundo de tu alma tal como tus hijos fueron quemados y solo podrás descansar de tu condena durante el día ahora fuera no serás bienvenida hasta que hayas espiado tu pecado

Purgatorio
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